Martín Palermo (La Plata, 7 de noviembre de 1973) es un ex-futbolista
profesional y actual entrenador argentino. Actualmente dirige al Club Atlético
Platense de la Primera División de Argentina. Como jugador, se desempeñaba en
la posición de delantero centro, donde llegó a destacarse como uno de los
mejores y más icónicos de la historia de Boca Juniors y del fútbol argentino.
Es el 3° goleador de todos los
tiempos en clubes del fútbol argentino, con 272 goles entre torneos oficiales
de AFA y copas internacionales, sólo superado por Ángel Labruna y Arsenio
Erico.6 Fue nombrado como futbolista del año en Sudamérica en 1998 e incluido
en el Equipo Ideal de América en 1998 y 2000.
Además, ha llamado la atención de
diversos medios de comunicación por haber protagonizado situaciones deportivas
de características extraordinarias y también por haber mostrado una gran
voluntad de recuperación ante circunstancias adversas, tanto deportivas como
personales.
Se formó en las divisiones juveniles
de Estudiantes de La Plata, donde también debutó profesionalmente en 1992. Con
el Pincha, permaneció por seis temporadas hasta su fichaje por Boca Juniors en
1997. Con los xeneizes, Palermo rompería el récord de goles en torneos cortos,
anotando 20 goles en el Torneo Apertura 1998,16 y ganaría tres títulos locales
y dos internacionales, destacándose por anotarle los dos goles al Real Madrid
en la Copa Intercontinental 2000 que consagraría a Boca como campeón del mundo.
En 2001 fue fichado por el Villarreal de España, donde solo pudo permanecer por
dos temporadas y nunca llegó a asentarse, además de cortos pasos por Real Betis
y Alavés, hasta su retorno a Boca en 2004. En su segunda etapa, Palermo se
consagraría como el máximo goleador histórico del club, con 236 goles, y
ganaría tres títulos locales y seis internacionales, colocándolo como el 4°
jugador con más títulos (13), y el 4° con más encuentros disputados (404). En
2011 se retiró profesionalmente en la institución, volviéndose uno de los
máximos ídolos de toda la historia del club.
Con la selección argentina, debutó
en 1999 y disputó la Copa América de ese mismo año, donde obtendría el récord
Guiness de errar tres penales consecutivos en un solo partido.21 No volvería a
ser convocado hasta 2009, donde anotaría un gol decisivo en las Eliminatorias
para que el seleccionado argentino clasifique al Mundial de Sudáfrica 2010, en
donde también, logró el récord de ser el jugador debutante más viejo (36 años)
en anotar un gol en la competencia, hasta ser superado por el panameño Felipe
Baloy en el Mundial de Rusia 2018.
Como director técnico, comenzó entrenando a los clubes argentinos Godoy
Cruz y Arsenal entre 2012 y 2015, para posteriormente entrenar a la Unión
Española, donde obtuvo el subcampeonato del Torneo Transición 2017. En 2018
entrenó al Pachuca de México y en 2019 a Curicó Unido de Chile. En la temporada
2021-2022, tuvo un buen paso por Aldosivi, logrando uno de los primeros puestos
en su respectiva zona.
Palermo nació en la ciudad de La Plata el 7 de noviembre de 1973 en el seno
de una familia hincha de Estudiantes de La Plata integrada por sus padres y un
hermano 6 años mayor. Su abuelo, Enrique Palermo, había jugado en el primer
equipo del Club Deportivo Vieytes de Magdalena
Su padre trabajaba en la empresa estatal Astillero Río Santiago y participó
activamente en las movilizaciones sindicales que en los años 1990 lograron
resistir el intento de privatización; trabajó allí 51 años hasta que se jubiló
en 2006.24 Su padre ha declarado también que el ejemplo y la vivencia familiar
de esas luchas sindicales:
Él también fue parte de esas reuniones familiares y de esas conversaciones.
El objetivo era nunca dejar de luchar, no bajar los brazos. Nuestra lucha tuvo
su premio. Creo que él también la tomó como ejemplo y también lo aplicó para
cual era su lucha, para cual era su objetivo.
Cursó sus estudios primarios en el Colegio Sagrado Corazón de La Plata.23 A
los 7 años (1980/1981) comenzó a jugar como arquero en las divisiones
infantiles del Club Estudiantes de La Plata impulsado por su hermano, quien
también jugaba de arquero en las divisiones inferiores del club.23 Invitado por
un amigo, a los 11 años ingresó al Club For Ever, donde jugó como delantero
durante los años 1984 y 1985. Alfredo García fue el entrenador que lo colocó
como delantero, convirtiendo 54 goles en su primer torneo en esa posición, en
1984.23 Allí conoció a los mellizos Guillermo Barros Schelotto y Gustavo Barros
Schelotto, quienes luego serían estrellas del Club Gimnasia y Esgrima de La
Plata, archirrival de Estudiantes. Desde entonces, Palermo y Guillermo Barros
Schelotto mantuvieron una relación de profunda antipatía mutua, hasta que
integraron el equipo del Club Boca Juniors años más adelante y terminaron
siendo amigos personales
El odio que nos teníamos era mutuo. Y venía de la secundaria, en La Plata,
ya que jugábamos en clubes distintos y nos enfrentamos en la divisiones
inferiores, por lo que la rivalidad venía de ambas familias, pero ahora somos
amigos.
Viendo su alto rendimiento, directivos de For Ever lo volvieron a llevar al
Club Estudiantes en 1985, pero esta vez como delantero en la pre Novena, aunque
debió inicialmente permanecer como suplente. Con ese equipo salió campeón en
todas las divisiones infantiles dirigidas por Eduardo Flores, incluyendo la
quinta, siendo el "hombre gol" del equipo, junto con Leonardo Serfaty
En esa época su apodo era «La Gata».
Entre los partidos jugados en aquel momento se destaca la final de sexta
división de 1990 entre Estudiantes y Gimnasia y Esgrima, el clásico platense.
Los dos partidos de ida y vuelta despertaron la atención de los aficionados que
llenaron la cancha, mientras que el partido era transmitido por la radio.
La estrella de Gimnasia era precisamente
Guillermo Barros Schelotto. La ida terminó con un triunfo estudiantil, por 2-0,
con un gol de cabeza de Martín. En la vuelta, Gimnasia se puso 3-0 y se
consagraba campeón, cuando un nuevo gol de cabeza de Palermo sobre el final,
llevó la definición a penales, donde se impuso Estudiantes. Los goles de
Palermo en esa ocasión pueden verse en el documental "Palermo el optimista
del gol" realizado por Terra. Cursó con dificultades sus estudios
secundarios, hasta tercer año en el Sagrado Corazón y luego en la sección
nocturna de la escuela Normal Benito Lynch, obligado por los entrenamientos. De
la quinta división, fue convocado directamente a la reserva, donde salió
campeón y goleador del equipo junto a Luis Suárez. En 1992 fue designado para
integrar la selección argentina juvenil sub 19.
El 12 de junio, por la ante última fecha del Torneo Clausura 2011, jugó su último partido en la Bombonera, su segunda casa y desde que el equipo salió a la cancha se escuchaba el solo canto: 'Palermo, Palermo, Palermo'. El partido terminó 1-1 y no pudo marcar ningún gol, pero eso a la gente no le importó porque se despedía un ídolo. La despedida fue muy emotiva, con lágrimas, tanto del propio Martín Palermo como por parte de los hinchas, que emocionados le dijeron 'Hasta siempre'. Ese mismo día, la conocida hinchada de Boca, "La 12", coreo un tema para él: 'Muchas gracias Palermo, vos nos diste los goles, vos nos diste alegrías, lo que hiciste por Boca no se olvida en la vida' y durante los 45 minutos en homenaje a él, la Bombonera no se quedó callada. También se escuchó 'Ole le, ola la, Palermo es de Boca y de Boca no se va'. El Club, le regaló un arco, siendo así el primer jugador del xeneize que le hacían un presente como esos. 'Los voy a llevar siempre en mi corazón' fue lo que dijo Palermo para su gente, los hinchas de Boca.
El sábado 18 de junio de ese mismo año jugó su último partido como
profesional, frente a Gimnasia y Esgrima La Plata, el clásico rival del club de
su debut, Estudiantes. No logró marcar ningún gol, pero en tiempo de descuento
bajó una pelota para un compañero, Cristian Cellay, y fue gol. El partido
terminó 2-2 y obligó a Gimnasia a jugar un partido desempate frente a Huracán
para ver quién jugaría la Promoción y quién descendería a la Primera B
Nacional. Los hinchas de Boca también llevaron a La Plata una bandera que decía
"Mi único héroe" en referencia al goleador. Palermo se fue de la
cancha con lágrimas en los ojos, diciéndole así adiós al fútbol profesional.